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La miniserie Manhunt: Unabomber<\/em><\/strong>, una producci\u00f3n de ocho episodios de Discovery Channel<\/strong> estrenada el a\u00f1o pasado, ha llegado para recordarme lo que pas\u00f3 con aquel hombre blanco lleno de odio en particular. Theodore Kaczynski<\/strong>, el \u201cUnabomber\u201d que tuvo en vilo al FBI y cuya persecuci\u00f3n ficcionalizada hemos visto en Espa\u00f1a a trav\u00e9s de Netflix<\/strong>, empez\u00f3 a mandar paquetes explosivos a finales de los a\u00f1os setenta. Para cuando le atraparon en 1996, hab\u00eda matado a tres personas y herido a 23 m\u00e1s, y se hab\u00eda hecho famoso por su manifiesto<\/strong> sobre la sociedad industrial. Fue condenado a ocho cadenas perpetuas, y cerr\u00f3 un trato que le mantendr\u00e1 en prisi\u00f3n hasta su muerte: sus defensores no alegar\u00edan enfermedad mental, y \u00e9l no solicitar\u00eda nunca libertad condicional o la revisi\u00f3n de su sentencia. \u201cUnabomber\u201d quer\u00eda que quedara claro que era consciente de lo que hizo, que eligi\u00f3 hacerlo y que no se arrepent\u00eda.<\/p>\n

La complejidad de este asesino, matem\u00e1tico metido a ermita\u00f1o, mis\u00f3gino y mis\u00e1ntropo casi a partes iguales, es el centro de la narrativa de la serie creada por Andrew Sodroski<\/strong>. Planteada como una lucha entre dos mentes, la del criminal y la del analista del FBI que se obsesiona con su arresto (Jim Fitzgerald<\/strong>, interpretado por un poco expresivo Sam Worthington<\/strong>), la producci\u00f3n de Discovery Channel plantea preguntas de calado: \u00bfDebemos tratar de entender al terrorista, o solo darle caza? \u00bfEs posible que la l\u00f3gica de quien mata convenza al \u2018hombre bueno\u2019 hasta el punto de llevarle a vivir como \u00e9l, pero sin sangre en las manos? \u00bfLa brutal violencia del Kaczyinski adulto tiene origen en su infancia y juventud? \u00bfEs producto del rechazo de una mujer, de la manipulaci\u00f3n de un mentor s\u00e1dico? \u00bfHasta d\u00f3nde llega el amor fraternal cuando tu hermano reparte bombas por los buzones? \u00bfLa inteligencia extraordinaria aplicada al mal sigue siendo genialidad? Y algo que como fil\u00f3loga me ha interesado igualmente: \u00bfpara qu\u00e9 sirve un ling\u00fcista?<\/p>\n

Adem\u00e1s del retrato de una guerra concebida en binario y sin matices (polic\u00eda vs.<\/em> asesino, bien vs.<\/em> mal, sistema vs.<\/em> antisistema), Manhunt: Unabomber<\/em> nos muestra tambi\u00e9n el nacimiento de una disciplina: la ling\u00fc\u00edstica forense<\/strong>. Con una pasi\u00f3n no tan contagiosa como deber\u00eda por la floja actuaci\u00f3n de Worthington como \u201cFitz\u201d, cada episodio nos va adentrando un poco m\u00e1s en el mecanismo de comprender una mente a trav\u00e9s de sus formas de expresi\u00f3n. El manifiesto del \u201cUnabomber\u201d se convierte en la biblia del agente que le pisa los talones, y con t\u00e9cnicas muy rudimentarias vemos c\u00f3mo se acerca a \u00e9l gracias a sus palabras. La l\u00f3gica matem\u00e1tica frente al lenguaje como espejo de la personalidad. Una batalla fascinante en medio de un mar de exclusivas medi\u00e1ticas, presiones gubernamentales, burlas de bur\u00f3cratas y descalabros personales. Si Kaczynski acab\u00f3 entre rejas, Fitzgerald \u2013al menos el de la ficci\u00f3n\u2013 tambi\u00e9n termin\u00f3 en su propia prisi\u00f3n interior.<\/p>\n

$\"Fitz$ <\/a><\/p>\n

Dentro de este marco narrativo, sin duda lo mejor de la serie dirigida por Greg Yaitanes<\/strong> es su protagonista. Paul Bettany<\/strong> (A Beautiful Mind<\/em>, Master and Commander<\/em>, saga Iron Man<\/em>\u2026) hace el que a m\u00ed me parece su mejor papel hasta la fecha. No es solo que consiga parecerse al \u201cUnabomber\u201d real (que tambi\u00e9n), sino que su voz, su gestualidad y todo su cuerpo se ponen al servicio de la misi\u00f3n letal de ese hombre atormentado. Sus escenas cara a cara con Fitzgerald son impecables, pero a\u00fan m\u00e1s reveladoras del hecho de que Kaczynski no era un loco sin m\u00e1s son aquellas en las que le vemos interactuar con un ni\u00f1o del pueblo cercano a su caba\u00f1a, o las que nos ofrecen sus reflexiones en forma de mon\u00f3logo interior. El \u201cUnabomber\u201d de los noventa, demacrado, aislado y hambriento de afectos, aparece hecho carne en un Bettany que necesita hablar poco y en voz muy baja para enviar su mensaje. Aunque solo fuera por \u00e9l, merecer\u00eda la pena ver esta serie. No lo duden.<\/p>\n

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