Representación, Ideología y Recepción en la Cultura Audiovisual

5 razones para ver la tercera temporada de Fargo

Fargo es una maravilla, lo era la película de los hermanos Coen y lo es la serie de Noah Hawley. Lo fue su primera temporada y también la segunda, por lo que la tercera debería seguir su estela ¿o no?

Ewan McGregor, nuestro Obi Wan Kenobi o nuestro inmoral Renton, está de vuelta en un papel doble, pues nos trae las caracterizaciones de los hermanos gemelos Stussy. Emmit y Ray Stussy representan las dos caras del American Dream, el exitoso y el fracasado, donde Ray se eleva sobre su hermano por su encantador patetismo y su llamativa conquista amorosa, traída a la pantalla por Mary Elizabeth Winstead. Pero algo falla en Emmit, demasiado soso y cansino, como si el papel se le quedara demasiado chico a un actor del nivel de McGregor, mientras que Ray te seduce por su simpleza, idiotez e inocencia. Lo cierto es que la serie aun no ha terminado y Emmit todavía está a tiempo de darnos alguna sorpresa y cambiar o endulzar su papel en el desenlace final de la historia, que seguro lo tenga. Además, Carrie Coon hace de policía, porque ya sabemos que en Fargo no ocurre nada sin que las fuerzas del orden estén por medio y, evidentemente, el desolador paisaje nevado de Minnesota tampoco podía faltar. La novedad eso sí es que estamos en el año 2010 y no demasiado atrás en el tiempo como pasaba en la segunda temporada.

Fargo no sería Fargo sin los ingredientes habituales y esta tercera entrega de la antología los tiene todos, unos motivos más que suficientes para engancharse a la serie:

  1. Crímenes absurdos
  2. Humor negro
  3. Historia cruzadas
  4. Minessota
  5. Nieve

Ahora bien donde sí destaca esta tercera temporada es en el malo de turno: el misterioso señor Vargas, un villano sin escrúpulos traído a la vida por el magnífico actor británico David Thewlis, más conocido por su papel en la saga Harry Potter como Remus Lupin o su rol en El niño de pijama de rayas. Desde luego este personaje ya forma parte del Olimpo de los malos malísimos de Fargo, gracias a su capacidad para imprimir terror y asco a partes iguales en cada una de sus apariciones. Tal es su nivel que opaca el fantástico trabajo de Ewan McGregor. Simplemente genial, como también lo fueron los recursos sonoros y de animación empleados en los primeros capítulos de la serie. Chapó.

Aun estamos esperando la conclusión a la enrevesada historia de los hermanos Stussy, pero seguro que no decepciona.Noah Hawley ha sabido reinterpretar todos los conceptos que estaban en la película original y a estas alturas Fargo es casi más suya que de los hermanos Coen, capaz de dirigir la esencia de la película hacia nuevas tramas y personajes siempre fieles a ese gran film. Seguro que ellos ven satisfechos cada nueva entrega de Fargo, nosotros, desde luego, sí lo hacemos.

 

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