Representación, Ideología y Recepción en la Cultura Audiovisual

El paso adelante de Lagertha en “Promised” (Recap 5)

Vikings regresa esta semana con un episodio que probablemente sea el más flojo de lo que va de esta cuarta temporada. A la falta de acción se le añade en esta ocasión la ausencia de esas escenas cargadas de simbolismo a las que tan mal acostumbrados nos tiene Michael Hirst. Esperemos que la semana que viene avance la trama, y desde luego así parece que será.

REFERENCIAS MITOLÓGICAS

Poco que decir a este respecto. Como mucho mencionar una de las escenas de Lagertha, en la que se la ve junto a sus guerreras realizando un ritual en honor al dios de la fertilidad Freyr, uno entre los Vanir.

Además, resulta interesante la escena compartida por Floki e Ivar, en la que el primero parece estar instruyendo al segundo en el conocimiento de las runas. Teniendo en cuenta la importancia de las estas en la mitología nórdica, en especial el papel que juegan en las andaduras del dios Odín, la introducción de este símbolo hace patente la importancia de Floki a la hora de otorgar a Ivar una educación vikinga no adulterada por las influencias cristianas de Ragnar. De ahí que vaya a convertirse más tarde en el azote de los cristianos.

ESCASO AVANCE EN LA TRAMA

Lo dicho, hay poco de destacable en el episodio de este semana. Ragnar sigue adelante con su romance con la esclava Yidu, al tiempo que sigue alejándose más y más de los suyos. De hecho, confiesa sentirse viejo y cansado, una revelación que no era necesario que verbalizase, ya que salta a la vista por cómo actúa.

Por otra parte, a la llegada del rey Harald de Noruega ahora se le une la de su hermano Halfdan. Ambos parecen estar más por la labor de invadir París que el propio Ragnar, y además empiezan a entablar relación con Floki, con el que están condenados a entenderse, al proclamar abiertamente su rechazo al cristianismo. ¿Qué tramas urdirá Floki con estos nuevos conocidos?

En Wessex más de lo mismo, al igual que en la corte de París. Vemos a un rey Ecbert que parece alejarse de la figura de Dios, haciendo tal vez un guiño a prácticas más oscuras, y a un Rollo cada vez más adaptado, a la espera de la batalla que finalmente le enfrentará a su hermano de una vez por todas.

Además, Ivar empieza a hacer honor a la reputación del personaje histórico en el que se basa al asesinar de un hachazo a un niño que intentaba arrebatarle un juguete.

Lo mejor: Honestamente resulta difícil destacar algún momento a lo largo de este episodio. Probablemente lo mejor sea lo que nos encontramos al final; la boda frustrada entre Lagertha y el conde Kalf. ¿Por qué habrá asesinado Lagertha a su prometido? ¿Estará en realidad embarazada? Seguro que pronto encontraremos respuesta a estas incógnitas.

Lo peor: Como siempre las escenas que transcurren en Wessex resultan las de menor interés. Por otra parte, la trama amorosa (¿o deberíamos decir lujuriosa, más bien?) entre Ragnar y Yidu, que ahora se ha destapado como hija del emperador de China, es también algo cargante.

Lo que esperamos: Desde luego esperamos que el próximo episodio contenga más acción y que nos deleite con escenas de componente simbólico. Presenciaremos el segundo asedio a la ciudad de París, con nuevos aliados y un Ragnar poco interesado en aquello que antaño tanto veneraba; el arte de la guerra. Esperamos despejar dudas acerca del sorprendente movimiento de Lagertha, así como ver cuál será el siguiente paso de Bjorn ahora que Torvi le ha revelado la procedencia del anillo que portaba el berserker que le atacó.

 

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