Representación, Ideología y Recepción en la Cultura Audiovisual

«Espejito, espejito… ¿Quién es la más mala del reino?»: «The Huntsman: Winter’s War»

Con el extenso título de The Snow White Chronicles. The Huntsman: Winter’s War se estrenó hace una semana en las carteleras españolas la considerada la «supuesta» (los que habréis visto la película sabreís a qué vienen las comillas) precuela de la película dirigida por Rupert Sanders, Snow White and the Huntsman, una de las varias reformulaciones que proliferaron (casi) como churros en 2012 – recordar las interpretaciones en la serie Once Upon a Time (ABC, 2011 – actualidad), la cinta Mirror Mirror (Tarsem Singh) y la española Blancanieves (Pablo Berger) – del cuento de hadas de los Hermanos Grimm «Sneewittchen» en 1812, es decir, Blancanieves. En esta nueva versión, aún partiendo de las bases del relato original, Kristen Stewart dará vida a una Blancanieves que terminará por convertirse en una guerrera para levantar un ejército en contra de su madrastra, la Reina Ravenna. Será gracias a Eric, El Cazador, quien después de traicionar a su reina, entrenará a Blancanieves para conseguir recuperar el reino.

Pues bien, siguiendo con las premisas de su predecesora, The Huntsman: Winter’s War pretende adentrarse en la historia personal de cómo Eric acabó formando parte del ejército de Los Cazadores, así como ampliar la mitología de este nuevo universo entorno a la figura de Blancanieves; aunque, sobretodo, la película se centrará más en lo último que en lo primero. La historia comenzará de la siguiente manera. La ambiciosa Ravenna (Charlize Theron), gobierna su reino con el apoyo de su hermana pequeña Freya (Emily Blunt), quien sufre una tragedia: matan a su hija recién nacida. Esta traición supone la liberación de su poder más oculto creando en ella una profunda tristeza y crueldad. Convertida en la Reina del Hielo formará su propio ejército de niños-soldado para conquistar todos los territorios, los denominados Los Cazadores. Por supuesto, dentro de estos niños se encotrará Eric (Chris Hemsworth) y su compañera Sara (Jessica Chastain) quien tendrán que enfrentarse a múltiples desafíos para impedir que el reino caiga en las manos equivocadas. Tranquilos, no he desvelado más de lo que ya se ha anunciado en los trailers…

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Charlize Theron y Emily Blunt son las hermanas Ravenna y Freya

Si bien la premisa de la que parte la cinta es bastante procedimental, el desarrollo de la trama y de los personajes también los será. Narrado siguiendo la fórmula de cuento de hadas con su voz off incorporada, The Huntsman: Winter’s War es un ejercicio bastante convencional para aquellos que esperaban una aproximación más turbia y oscura que, en parte, ofrece en gran mayoría la primeros 35-40 minutos, los más interesantes de la cinta en cuanto a la propuesta inicial y a las temáticas que se podrían haber desarrollado – sobretodo a lo que a los conflictos y conspiraciones políticas se refiere – y que se irán recuperando muy discretamente y de manera muy simplona en el resto de la película. Es evidente que el film recoge una amalgama de referentes visuales y de tono que no acaban de funcionar en su totalidad a pesar de su estupendo diseño de producción y de vestuario. Podemos encontrar desde Game of Thrones, a Las Crónicas de Narnia, hasta culminar con Frozen… o todas aquellas imagenes mentales que se le puedan pasar al espectador por la cabeza donde se mezclen Tierra Media y paisajes nevados.

Sin embargo, no creo que The Huntsman: Winter’s War pretenda ser más de lo que se espera de ella: una película de aventuras fantásticas donde no pueden faltar las reinas malvadas con capacidades mágicas en busca de poder (una más mal que la anterior); una pareja protagonista con sus conflictos internos y sentimentales; aliados graciosos (pero leales) en el camino; enfrentamientos con criaturas extrañas; y, por supuesto, recorriendo el espectacular mundo fantástico en el que transcurre la historia. Estoy de acuerdo en que son cuestionables muchos aspectos de la trama, como algunas lagunas argumentales respecto a su predecesora o no aprovechar del todo el talento interpretativo de sus tres actrices principales – que están las tres divinas, por cierto. En mi opinión, es una película entretenida y correcta, que no tiene mayor ambición que la espectacularidad y un mensaje universal y sencillo.

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Sara y Eric son los mejores guerreros de Los Cazadores

Pero, más allá de sus carencias, hay que admitir que la película tiene un valor feminista muy importante. Y no tanto a nivel narrativo en sí como a nivel de producción. Cada film se enmarca en un contexto de producción e industrial concreto y no es casualidad que Emily Blunt y Jessica Chastain se unan a Charlize Theron – tres grandes actrices con una voz activa y muy relevante dentro de la defensa de la mujer en Hollywood – en un proyecto donde los personajes femeninos son mucho complejos que el propio «Huntsman» (que, en definitva, es Chris Hemsworth haciendo de Chris Hemsworth en ropas medievales). Sobretodo en un momento en el que en las superproducciones – y en la industria cinematográfica –  por cada siete héroes encontramos a un heroína (para ejemplo de ello, que se lo digan a La Viuda Negra y a La Bruja Escalta en The Avengers, ¿no?) Tres personajes contradictorios, vulnerables, pasionales, y, lo que es más importante, protagonistas.

Entonces, después de explicar mis modestas opiniones respecto la película, voy a formular la pregunta del millón: ¿es The Huntsman: Winter’s War una buena o mala película? Bueno, sinceramente, es difícil afirmar una cosa o la otra. Esta es una de esas cintas en las que el público y la crítica no se pone de acuerdo con facilidad. Por una lado, están aquellos que la han disfrutado sin más (en el que me incluyo yo misma) y, por otro lado, aquellos detractores que la han encontrado demasido convencional… Algunos que les ha gustado más que su predecesora y otros que no… En este caso, intentado mezclar mi subjetividad como espectadora y con una mirada más objetiva, podríamos concluir que The Huntsman: Winter’s War se puede ver como una película fallida en algunos aspectos para los más entendidos, (y es más que comprensible) pero que es un film sin muchas pretensiones en la que cualquier espectador podrá pasar un buen rato, incluso los más exigentes.

 

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