5 razones para ver “Nevenka” (Maribel Sánchez-Maroto, 2021)
Tras veinte años después del suceso, Nevenka Fernández decide contar su historia poniéndose frente a las cámaras para explicar lo que verdaderamente sucedió. El acoso al que fue sometida se ve claramente reflejado en la miniserie-documental de Netflix, dirigido por Maribel Sánchez-Maroto (2021) y compuesta por tres episodios. Se centra en la narración de una joven universitaria que entra a formar parte del Ayuntamiento de Ponferrada como concejala del Partido Popular (PP), quien en ese momento intentaba tener una imagen donde la mujer se viera representada y quien termina dimitiendo por haber sido víctima de acoso sexual por parte de Ismael Álvarez, alcalde de la Ciudad.
1. Si el “no” racial fue, al menos parcialmente, de Rosa Parks; el “no es no” a la misoginia institucional fue de Nevenka Fernández. Si bien Nevenka recibió la “oportunidad” de trabajar como concejala del PP, para los que estaban a favor del alcalde acosador se les ocurría pensar en cómo podía ella, una mujer joven de solo 26 denunciar la doble moral de quienes le habían ofrecido un trabajo, un sueldo y una reputación. Sin embargo, ella se atrevió a decir “no”.
2. “Tengo 26 años y tengo dignidad”: la antecesora del “Me too” español. Resulta necesario recordar que hace apenas unos años las manifestaciones se hicieron presentes en las calles para condenar y denunciar a los miembros de “La manada”, violadores en grupo de una joven que se hizo eco en todo el país. La disidencia y el rechazo estaban servidos y la sociedad, en general, se aprovechó de su imagen para ofrecer una proyección de “femme fatale” más que de víctima, en tanto que ella era una mujer joven, con estudios e inteligente.
3. Se destapa el caciquismo de las diputaciones provinciales. Si bien Nevenka consideró una oportunidad para su futuro laboral, aceptar el cargo de concejala, nunca pensó que la institución pudiese abusar de ella. En ese momento, existían algunas mujeres-víctima que debían someterse a acciones de acoso por parte de sus superiores si querían mantener su trabajo y eso se consideraba como permisible si venía dicho, por ejemplo, por el fiscal jefe de León. Formaba parte, en suma, del contrato laboral y social. Si bien, tras conocerse los hechos, se vio sometida a una humillación por los que se habían considerado como compañeros de partido, quienes egoístamente solo velaban por su propio bienestar y por intentar mantener su posición; en la oposición Nevenka sí encontró una aliada: Charo Velasco pidió al resto de sus compañeros de oposición de partido del Ayuntamiento, que no se utilizara lo sucedido como arma política, intentando mantener al margen de las decisiones políticas aquello que estaba en manos judiciales.
4. El trabajo de los jueces, a lupa. El mismo fiscal José Luís García Ancos tuvo que ser avisado por el mismo juez de que Nevenka declaraba en calidad de testigo y no de acusada porque las preguntas se formulaban de manera en la que parecía que ella era la verdadera responsable del acoso. Esta maraña machista en la que la propia lupa investigadora está manchada de prejuicios subjetivos y machistas de un fiscal, el cual recogía, de manera subyacente, el parecer de aquellos que apoyaron al alcalde condenado: “A mí no me acosan si no me dejo” fue uno de los lemas utilizados para culpabilizar la figura de Nevenka y, por tanto, eximir al alcalde de sus actos de acoso. El caso cayó en el sensacionalismo y en una campaña de descrédito hacia la figura de Nevenka (slut-shaming) que incrementaron la sensación de vergüenza y pudor de la víctima.
5. Una docu-serie con bastantes elementos de reportaje que puede ser el inicio de otros productos similares. Sin duda, los tres capítulos de la miniserie nos permiten reflexionar sobre la misoginia, el patriarcado y el caciquismo que podemos encontrar en las diputaciones provinciales, hace más de 20 años. Si en ese momento el PP pretendía ofrecer una imagen de “modernización” en su Ayuntamiento. Su voz se alza con un tono de pesadumbre por lo vivido, pero de esperanza y de coraje para ejemplificar que sí se puede luchar contra lo establecido. No se pretende aportar ningún toque morboso ni sensacionalista, sino relatar los hechos con una gran variedad de pruebas documentales (con el testigo real, con fotografías y vídeos del juicio).
Doctora en Filología por la Universitat de les Illes Balears (2022) y, anteriormente, becaria predoctoral con una tesis centrada en personajes infantiles creepies, discursos de maternidad contemporánea, New Horror y narrativa transmedia. Máster en Lenguas y Literaturas Modernas (especialización en estudios literarios y culturales, UIB); Máster en Formación del Profesorado (Lengua y literatura, UIB) y Posgrado en el uso del cine como recurso educativo (UNED). Interesada en las representaciones audiovisuales infantiles y las maternidades contemporáneas, además de la aplicación del audiovisual y la narrativa transmedia como recurso educativo.