Representación, Ideología y Recepción en la Cultura Audiovisual

Heads Up y el renacer de la estética romeriana (Recap 7)

Jesús Diamantino nos trae sus últimas impresiones del séptimo capítulo de la ficción zombi. Glenn no abandonó el infierno; su regreso significó una momentánea suspensión de la crisis que viven los personajes en Alexandria. Como advertíamos anteriormente, la escala de fatalidades que estructuran la narratividad de la serie anulan por completo cualquier posibilidad de esperanza o armonía que pueda llegar a suscitarse, ya que el mundo es de los muertos y los vivos son solo figuras incongruentes.

La constante disolución de la comunidad de supervivientes se acentúa aún más en este ciclo de capítulos, ya que los creadores han apostado por el recurso de la fragmentariedad situando en diversos segmentos paralelos a los protagonistas.

Aunque el esperado y predecible resurgimiento de Glenn estableció el motivo central del episodio, este no atenuó la distención argumental que esta nueva temporada viene arrastrando desde el cuarto capítulo, salvo por algunos detalles que merecen ser examinados: el primero de ellos es la determinación de Morgan por no matar a otros seres humanos, problematizando los principios de supervivencia que ha establecido Rick en el grupo. De esta manera, comienza a manifestarse uno de los conflictos más emblemáticos de la temporada, pues sin duda se avecina un quiebre entre ambos personajes. Por otra parte, la incapacidad de los habitantes de Alexandria por situarse en el contexto apocalíptico, la inseguridad y el creciente sentimiento de vulnerabilidad, deparan, probablemente, la caída de la comunidad.

Rick en uno de los momentos del capítulo

Además, al igual que en el primer y tercer capítulo, se hace más evidente el influjo romeriano al otorgar protagonismo a la horda zombi como personaje colectivo; aspecto que hasta el momento no había sido del todo explotado. La secuencia final de Heads Up nos recuerda al cierre de Better angels de la segunda temporada que da pie al maravilloso homenaje a La noche de los muertos vivientes de Romero. De esta manera, el derrumbe que permite la entrada a los caminantes representa metafóricamente la destrucción de Alexandria y la insostenible utopía de una civilización.

Lo mejor del capítulo: la capitalización transgresora del zombi y el regreso de Glenn.

Lo peor del capítulo: el desarrollo cansino de la acción.

Lo que está por venir: un buen homenaje a George Romero.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *