Representación, Ideología y Recepción en la Cultura Audiovisual

The Big Bang Theory: reseña de los episodios 9 y 10 de la temporada 12

¡Pobres Amy y Sheldon! En el noveno episodio de la serie, titulado «La negación de la citación» se muestran tan abatidos que parecen haber perdido algo tan querido como un hijo. Es cierto que su pérdida no alcanza la categoría de un ser humano, pero el símil es válido en cuanto a que ésta es también fruto compartido y común de los dos, e incluso se gestó paralelamente a su boda, lo que contribuye también a que le tuvieran un cariño especial. Acabemos con el misterio, ¿de qué estamos hablando? Pues nos estamos refiriendo nada más y nada menos que al proyecto sobre la súper asimetría en el que estos dos genios llevaban trabajando meses duramente. Ya que estaban a punto de publicarlo, Leonard, a quien piden ayuda para el apartado de las citas, descubre que otro investigador ruso (por cierto que es Howard quien, siendo conocedor de ruso, traduce la «mala noticia») había trabajado este tema anteriormente y había descartado su utilidad ya en 1978. Antes de seguir comentando las consecuencias nefastas que trae consigo el hallazgo, quiero hacer un par de comentarios sobre aspectos que me han llamado la atención como investigadora. Primero, resulta extraño que en pleno siglo XXI, y más aún en el caso de estos investigadores que tan expertos son en el uso de multimedia y demás, tengan que buscar las citas de trabajos en una biblioteca que parece más bien una mazmorra medieval. Además, la búsqueda de citas suele irse haciendo paralelamente a la elaboración del trabajo de investigación. Tampoco es normal que Leonard encuentre el contenido de la «mala noticia» mientras busca la cita que los propios autores se supone que refieren en su trabajo (y por eso Leonard tiene que buscar). Pero bueno… es una serie, es ficción… No sigamos desmontando este tipo de aspectos. Volviendo a las repercusiones en Amy y Sheldon, hay que valorar el esfuerzo que hace éste por aceptar de forma madura el traspiés. Pero poco le dura, y acaba destruyendo la pizarra en que iban anotando sus «progresos» investigadores, con una ira a la que no nos tiene acostumbrados. Amy intenta animarle mostrándose calmada y ofreciéndole incluso cantarle su canción favorita para momentos tristes («dulce gatito»: si esto no es amor…), pero esto también enerva a Sheldon. Entonces, la investigadora da rienda suelta a su propia ira producida por la misma frustración que comparte con su esposo. Sheldon comenta que esta actitud le sirve aún menos. Total, que acaban deprimidos, tirados en el sofá, y perdiendo incluso la noción del día en que viven, pues ni siquiera reúnen fuerzas para ir a trabajar. Ni sus amigos-vecinos consiguen animarles echándoles piropos y halagos… Necesitan, como quien pierde un ser querido, tiempo para hacer su propio duelo. Lo bueno es que la pareja muestra que, como se promete el día de la boda, están unidos para lo bueno… y para lo malo. 

En el décimo episodio, «La iluminación del vídeo»,  los amigos de la pareja creen que ha llegado el momento de pasar a la acción y tratar de ayudar a Shamy de manera más directa. Para ello, además de buscar ayuda profesional en la madre de Leonard (que les aconseja que ritualicen el funeral de la teoría de Shamy, y que ellos toman al pie de la letra, dando lugar a graciosos momentos), toman la decisión de no decir ciertas palabras y expresiones que les puedan recordar a su fallida teoría. Pero en su primera puesta a prueba, hieren -sin esperarlo- la sensibilidad de Sheldon, que sigue a flor de piel. Leonard considera que debe recurrir a usar la cinta de video que tiene guardada como un tesoro para algún momento crítico de la vida de su amigo, como es este. Ésta contiene la grabación del propio Sheldon de niño -él mismo es la única persona a la que Sheldon realmente toma en serio- , con lo que se ponen en contacto una vez más la precuela de la serie y la original, apareciendo así en este episodio el pequeño Iain Armitage, Lance Barber (su padre en The Young Sheldon) y Montana Jordan (hermano de Sheldon en la ficción). Pero de nuevo parece que la mala suerte persigue a Sheldon adulto: su preciado video es interrumpido por la grabación de su padre de una de sus arengas a su equipo cuando estaba perdiendo. No obstante, las palabras de su progenitor terminan siéndole más útiles que las suyas propias -que, además, se sabía de memoria. El mensaje venía a decir que se aprende más de las derrotas que de las victorias: nada más útil en un momento como el que está viviendo el protagonista. A partir de aquí, Shamy entra en un círculo virtuoso: Sheldon, además de salir reforzado de su aparente fracaso, reconoce que él y su padre no eran tan distintos como él siempre había pensado (al compartir esta amarga experiencia de la derrota); esto le lleva a pensar que las cosas son de una manera (asimétricas) u otra (simétricas) según la perspectiva desde la que se analicen, lo que lleva a la pareja a concluir que muy posiblemente su teoría de la súper asimetría podría ser válida desde otros muchos puntos de vista excepto desde el de los científicos rusos que la refutaron hacía años, lo que incluso incrementaría la validez de su descubrimiento. Y la pareja vuelve a ponerse manos a la obra con su labor investigadora incluso con mayor ilusión que antes.

La trama de este décimo episodio concede espacio a otros personajes, como suele ser habitual. En esta ocasión, lo hace también de forma paralela, al hacer que Bernadette tenga acceso también a una cinta de video en la que Howard muestra sus habilidades como mago (que ya se hicieron evidentes en episodios anteriores), en lo que constituyó un intento por parte de su marido de convertirse en miembro del «Castillo Mágico». Bernie, que en su infancia participó en concursos de belleza infantiles, pone en práctica las asertivas técnicas de su madre, con la intención de hacer participar de nuevo a su marido en la citada competición. Como podemos sospechar, la aventura no acaba muy bien para el pobre Howard, que termina destruyendo el Rolex de un miembro del jurado, pero, eso sí, protagoniza toda una muestra de amor hacia su esposa, por la que ha hecho el esfuerzo de volverse a preparar para un concurso de este tipo. De nuevo, triunfa el amor en la serie; y a dos bandas.

 

 

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