The Magicians (Syfy): Who can be a magician? (episodio piloto)
Basada en la trilogía de novelas fantásticas de Lev Grossman y creada por John McNamara y Sera Gamble (Supernatural), Syfy apuesta por presentarnos su episodio piloto de la serie The Magicians, cuyo estreno en pantalla llegará en exclusiva el próximo 3 de febrero emitido por Syfy España. Tras el éxito narrativo de Grossman y aprovechando la buena acogida de los productos audiovisuales que entroncan con lo fantástico internacionalmente (bastaría recordar Game of Thrones, por ejemplo), esta serie parece encajar dentro de los proyectos esperables.
¿Su premisa? Quentin Goldwater (Jason Ralph) es un chico inteligente, sensible, poco sociable pero con un aparente rico mundo interior en el que la lectura de novelas fantásticas (y fan de la saga Fillory and Further) parece ocupar gran parte de su tiempo. Anclado en una pasada adolescencia a la que se aferra (¿Por un síndrome de Peter Pan? o ¿por una insatisfacción con su entorno? –quizás) y de la que se queja su amiga Julia (Stella Maeve), ambos esperan ser aceptados en Yale pero acaban realizando una prueba de acceso poco convencional en el Brakebills College en el que las leyes del mundo racional se difuminan.
Who can be a magician? Brakebills College, la Universidad de los elegidos
Quentin realizará el examen de su vida: sí, el de conocer cuál es su identidad y explorar qué es capaz de aportar al mundo (el cual puede desafiar las leyes racionales). Es por ello que un tribunal le pedirá que muestre los poderes que él desconoce que posee. ¿Cómo? Barajando unas simples cartas y con esa intención, el director le provocará para despertar su ira y que demuestre los poderes los cuales deberá aprender a desarrollar al ser admitido en un prestigioso programa académico y proporcionando una de las escenas visualmente más impactantes del piloto (y mostrando el atractivo y colorido mundo mágico frente al tedioso mundo real).
El episodio piloto no ha estado exento de una lluvia de críticas por poder considerarla como una serie basada en (¿otro?) Harry Potter, en este caso, adulto y destinada a una audiencia con nostalgia al mundo de J.K.Rowling e incluso con ganas de saciar su sed de magia y fantasía. Algunos ingredientes presentados en el piloto como las noches de desfase dentro del contexto universitario en Brakebills, la magia como tentativa de placer y de drogas o el sexo místico pueden ser un guiño claro a una audiencia que ha crecido, aprendido y evolucionado entre personajes, páginas, pantallas y varitas en un Hogwarts que consideran como su propia casa.
Todo ello entronca con el concepto de evocative spaces (de Henry Jenkins) pues la elección de la estética narrativa implica introducir a la audiencia en espacios que ya ha visitado (Hogwarts, por supuesto) a través de su fantasía y, en este caso, a través de las filiaciones que apuntamos con respecto al mundo de Harry Potter. Existen más similitudes, un enemigo: The Big Bad que será igual o más poderoso que el director aunque también una profesora de pociones, una biblioteca con libros prohibidos, unos compañeros cuyos poderes se desconocen (todavía) y con los cuales, hipotéticamente, se podrán establecer lazos de amistad.
En definitiva, pese a que asistimos a una historia que toma como elementos clave los tópicos del género y se nutre del mundo de HP, ¿qué verdadero fan de la magia y la hechicería querría perderse The Magicians? Seamos (o no) los elegidos para ingresar en Brakebills, no perdamos de vista la idea subyacente del nuevo proyecto de Syfy: Magic is a drug. Por ello, dejémonos hechizar.
Doctora en Filología por la Universitat de les Illes Balears (2022) y, anteriormente, becaria predoctoral con una tesis centrada en personajes infantiles creepies, discursos de maternidad contemporánea, New Horror y narrativa transmedia. Máster en Lenguas y Literaturas Modernas (especialización en estudios literarios y culturales, UIB); Máster en Formación del Profesorado (Lengua y literatura, UIB) y Posgrado en el uso del cine como recurso educativo (UNED). Interesada en las representaciones audiovisuales infantiles y las maternidades contemporáneas, además de la aplicación del audiovisual y la narrativa transmedia como recurso educativo.