¿Un videojuego de rol deportivo? El nombre es “Pyre”
El estudio indie Supergiant Games es sin lugar a dudas uno de los más exitosos de esta parcela de la industria, con dos superventas de gran valor a sus espaldas como lo son Bastion (2011) y Transistor (2014). Se trata de dos videojuegos que se enmarcan en el género de los rpg (role playing games, o videojuegos de rol). Los integrantes de Supergiant Games cuentan por tanto con un bagaje más que demostrable, y es por ello que desde el momento en que se anunció Pyre se levantó un gran revuelo entre los seguidores de estas otras producciones anteriores. El pasado 25 de julio se produjo el lanzamiento de la nueva aventura, y la expectación estaba más que justificada.
En Pyre el jugador se pone en la piel de una protagonista femenina de misteriosa identidad, a la que los demás personajes que se encuentra por el camino se refieren con el apelativo de “lectora.” Esto es debido a que, a diferencia de los demás, ella tiene la capacidad de leer, lo que le permite acceder al conocimiento que se encierra en unos volúmenes en los que se detalla como participar en unos juegos conocidos como los “ritos.” Además, como lectora, es capaz de descifrar el lenguaje de las estrellas, y con solo echar un vistazo al cielo puede dilucidar en que lugar se será convocado el siguiente rito, dependiendo del brillo de los astros. Al inicio de la aventura tres misteriosos enmascarados dan con nuestra protagonista en lo que parece ser un desierto, y la acogen en su carruaje ambulante a cambio de su ayuda en dicha competición, ya que sin un lector que dirija al equipo es imposible acceder al sistema. El lector sería, pues, una especie de entrenador.
Pero, ¿en qué consisten los “ritos”? La respuesta es sencilla a la par que extraña. Se trata de una suerte de baloncesto estelar, pero sin canastas. El objetivo de los dos equipos participantes es extinguir la hoguera del rival introduciendo un orbe celestial en ella repetidas veces. De ahí el nombre del videojuego, “Pyre,” o pira, en español (cabe mencionar que la traducción a este idioma está en proceso de producción actualmente). A los equipos se los conoce con el nombre de “triunviratos,” ya que, aunque cada equipo lo pueden componer más de tres jugadores, tan solo tres son los que pueden y deben participar en cada rito. De hecho, el equipo al que dirige el jugador, conocido como los “Nightwings,” llega a contar con siete jugadores en sus filas. Originalmente son tres: el humano Hedgwyn, la demonio Jodariel y el perro Rukey. Sin embargo, a medida que avanzamos de rito en rito nos encontramos con los otros cuatro compañeros que podremos utilizar para cumplir con nuestra misión.
Así pues, Pyre es un videojuego muy arcade en cuanto a la ejecución de los ritos se refiere, poniendo sobre la mesa un entretenimiento fácil y efectivo, similar al que proporciona un videojuego de deportes cualquiera. No obstante, es el espacio entre rito y rito y la preparación previa a cada uno de ellos lo que convierte a esta obra en un videojuego de rol con una historia trabajada capaz de cautivar a los fans de este género. En primer lugar, cada integrante del equipo o triunvirato cuenta con sus propias características que le permiten desempeñar un papel u otro en cada contienda. Por poner un ejemplo, la demonio Jodariel es la más fuerte de entre sus compañeros, pero también la más lenta, mientras que el perro Rukey presenta el caso opuesto; es extremadamente rápido, pero igualmente débil ante los ataques enemigos. Por lo tanto, a la hora de enfrentar a otro equipo, el jugador debe decidir que personajes le conviene convocar al tablero dependiendo, entre otras cosas, de las características del triunvirato rival.
Se trata de jugar bien las cartas con las que se cuenta, y potenciar a aquellos personajes que el jugador prefiera a través de amuletos que otorgan habilidades individuales y del estudio de ciertos volúmenes de la lectora, que le permite otorgar mejoras individuales a los distintos personajes en momentos concretos, o mejoras globales que afectan a todos los personajes, pero cuyo impacto es menor. Además, con cada victoria los personajes obtienen puntos con los que ascender de rango, lo que nos permite escoger entre distintas mejoras en el árbol de habilidades con el que esta dotado cada uno de ellos. Así, implementando el rango y las capacidades de los personajes podemos enfrentar retos cada vez mayores.
Pero este es tan solo el primer aspecto de rpg que define a Pyre, siendo su original e intrincada historia su principal componente de rol. Pyre narra la historia de una tierra habitada por exiliados, seres que han sido expulsados de un lugar conocido como The Commonwealth; un país construido a partir de las cenizas de un antiguo imperio. El único modo de regresar a este reino una vez expulsado del mismo es salir victorioso de los ritos una y otra vez hasta alcanzar un rito de características especiales, conocido como rito de liberación, en el que lo que está en juego es, precisamente, el perdón por las afrentas cometidas, la recuperación del estatus perdido, y el retorno a The Commonwealth. Esta es la motivación que mueve a los Nightwings inicialmente, pero también es cierto que este colectivo está rodeado de un halo de misterio que paso a paso se va disipando hasta revelar su objetivo real.
El apartado artístico es de lo más reseñable en Pyre, ya que dota con vida propia al universo creado por Supergiant Games, con paisajes y personajes variopintos e imaginativos, que sorprenden y no decepcionan. Todo esto se ve acompañado de una banda sonora excelente cuyas melodías recuerdan por momentos a las de la saga Diablo, contribuyendo considerablemente a la ambientación y a amenizar el viaje a través de estas tierras, a medida que la narrativa avanza y aprendemos más acerca del funcionamiento de este universo, de sus leyes, y del objetivo real de los Nightwings: retar al sistema impuesto por The Commonwealth, liberando a todos los exiliados a la vez. Por tanto, el cuestionamiento del status quo, la legitimidad de las reglas impuestas desde arriba, la distinción entre ciudadanos de primera y de segunda y la revolución social son temas que se ponen de relieve en Pyre.
En conclusión, Pyre es un híbrido atípico entre un juego de rol con una historia, mecánica de juego e historia más que logradas y un videojuego deportivo, que combina lo mejor de ambos mundos proporcionando una experiencia desconcertante al principio, pero estimulante pasadas las primeras horas de juego, todo ello aderezado con una banda sonora excelente. Además, no renuncia a poner de relieve cuestiones políticas extrapolables al mundo real, que pueden invitar al jugador a la reflexión pese a la tierra que pone de por medio el hecho de que se trate de un mundo épico que nada tiene que ver con el nuestro al nivel más superficial. En definitiva, se trata sin lugar a dudas de uno de los grandes lanzamientos indie en lo que va de año.