Representación, Ideología y Recepción en la Cultura Audiovisual

“Gemini: Heroes Reborn”, un videojuego transmedia

Hace aproximadamente diez años, cuando la nueva época dorada de las series estaba en su amanecer y todos andábamos entusiasmados con Lost, empezó a rodar la serie Heroes (NBC, 2006), una producción que parecía que, por fin, se daba cuenta de que el formato periódico y regular que tienen los cómics tiene su mejor traslación en el mundo audiovisual en las series de televisión. Heroes empezó con un planteamiento brillante, tomando prestando de algunas de las obras maestras del género de superhéroes del cómic (especialmente, que yo recuerde, del Watchmen de Alan Moore). Las dos primeras temporadas -quizá especialmente la primera- fueron un brillante ejercicio de estilo en el género, pero la serie no aguantó el tipo. Fuera por querer aprovechar el tirón y alargarla innecesariamente, fuera porque los guionistas se quedaron sin ideas, la serie se canceló tras la cuarta temporada, en un momento en que se había vuelto completamente olvidable.

En 2015, la serie tuvo, como todos los protagonistas de su género, una resurrección con el nombre de Heroes Reborn, que parecía prometer, pero el vuelo fue corto: sólo una temporada. Pero al mismo tiempo que se lanzaba la season finale, apareció en el mercado el videojuego oficial de la saga titulado Gemini: Heroes Reborn, que actuaba a modo de precuela. El juego pasó completamente desapercibido, quizá por un mal cálculo de márketing, o quizá porque era un producto de gama media, incapaz de competir en la fiera lucha que es el mundo de los videojuegos con títulos de ese mismo año como Bloodborne, Fallout 4, The Witcher 3, Metal Gear Solid V o Star Wars: Battlefront. Yo mismo lo descubrí y jugué recientemente gracias a que lo encontré en un saldo por apenas unos euros. Vamos a recordarlo en RIRCA porque tiene algunos aspectos interesantes.

En Gemini, tomamos el papel de Cassandra, una chica aparentemente normal que descubrirá a partir de los acontecimientos vividos su auténtico origen. La historia se inicia cuando Cassandra y su amigo Alex penetran en un complejo abandonado. Allí encuentran a unos guardias que se llevan preso a Alex, y Cassandra descubre por casualidad uno de sus poderes: viajar en el tiempo. De esta manera, intentando rescatar a Alex, Cassandra irá siguiendo el hilo que la llevará a descubrir todos sus poderes y a entender qué son esas instalaciones y por qué están relacionadas con ella.

Gemini-Heroes-Reborn_TK-shield

El videojuego es un FPS en el que a veces tendremos que combatir y en otras usar la astucia y la discreción para avanzar. En sí, el videojuego no es muy largo (se necesitan menos de seis horas para finalizarlo, y eso demorándose bastante o siendo poco diestro) y la historia no deja de ser bastante tópica (un personaje que descubrirá que todo lo que sabía era mentira). Lo que resulta interesante y novedoso de este videojuego es que, gracias al poder de viajar en el tiempo, podemos alternar esos tiempos para avanzar: el pasado y el presente. Es decir, podemos avanzar en dos tiempos a la vez, saltar de uno a otro, incluso llevar objetos y personas de una línea cronológica a otra. Éste, para mí, es el mejor hallazgo del videojuego, algo que no puede reproducirse en ningún otro medio. Ese juego con el tiempo es el que permite crear una narrativa cíclica y que tenga relación el estado inicial del espacio que visita Cassandra con sus acciones posteriores.

El juego contiene pequeños guiños a la saga televisiva: detalles, símbolos, easter eggs que podemos ir descubriendo si somos ese tipo de jugadores que no dejan un milímetro de pantalla por explorar. A la vez, quizá porque el protagonista es una chica joven, el videojuego no está basado en el enfrentamiento directo a través de la violencia, sino que a veces es mejor uno indirecto, ya que en ningún momento podemos empuñar armas. En esto, en algunas ocasiones nos recuerda a Mirror’s Edge. Por suerte, la baja inteligencia artificial de los enemigos juega a nuestro favor cuando todo lo que podemos hacer contra ellos es tirarles sillas y piedras o (mi técnica preferida) arrojarlos por los desniveles. En este sentido, este tipo de ataque/defensa me parece, aunque farragoso, más coherente y realista.

A posteriori, uno entiende también por qué no funcionó demasiado bien este videojuego. A pesar de ser, en suma, correcto, su duración y su falta de aspiraciones jugó en su contra y cayó en el pozo de los mediocres. Y es que el mercado del videojuego era quizá demasiado duro para un título como Gemini: Heroes Reborn, que debería haber encontrado apoyo, sobre todo, en los fans de la serie.

 

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