Representación, Ideología y Recepción en la Cultura Audiovisual

La mitad que faltaba: Grace Hanson

El mes pasado le dediqué en este foro una entrada de la sección NOMBRES PROPIOS a la sabia y divertida Frankie Bergstein, coprotagonista de la comedia de Netflix Grace y Frankie. Como no podía ser de otra manera y para equilibrar la balanza, hoy mi centro de atención es la otra mitad de la serie: Grace Hanson, interpretada por la actriz estadounidense Jane Fonda. Igual que Frankie, ella se ve sorprendida por la “noticia bomba” sobre la homosexualidad de su marido Robert (Martin Sheen), pero para ella el impacto es incluso mayor, porque se mueve en un mundo regido por las apariencias y el qué dirán.

Grace es una mujer de éxito en los negocios, creadora y gestora de su propia marca de cosméticos, Say Grace. Cuando llega el gran cambio de vida, está en una situación cercana a la jubilación, y la empresa ha ido quedando en manos de su hija mayor, Brianna (June Diane Raphael). Sin embargo, cuando se encuentra con que debe reinventarse, Grace decide que tiene que volver a la actividad profesional, que es para ella una parte importante de su identidad. Negocia con Brianna –con quien tiene una relación más bien tensa– para retornar a su oficina, y cuando las cosas no van como ella desea, se lanza a la aventura empresarial con Frankie. Los lubricantes ecológicos y los vibradores para mujeres de edad avanzada consiguen sacar a la fiera comercial que Grace lleva dentro, y juntas de convierten en colegas con una misión. La contribución de cada una es muy diferente, ya que Frankie es pura creatividad y caos mientras que Grace es orden y control, pero encuentran la forma de complementarse.

El lado sentimental de Grace, golpeado en la línea de flotación por el inesperado divorcio de Robert, también se recupera poco a poco a lo largo de la serie. Alrededor de los 80 años (aunque ella trate de ocultarlo por coquetería), Grace es una mujer hermosa y activa sexualmente, y tendrá diferentes compañeros de aventuras, relaciones y encuentros esporádicos. Con Guy (Craig T. Nelson) se dejará llevar por la nostalgia de lo que pudo haber sido en un pasado que ya no volverá; con Phil (Sam Elliott) se debatirá entre el amor por él y la solidaridad con su mujer enferma de demencia; con Nick (Peter Gallagher) se topará con el prejuicio sexista de mirar mal a una mujer con un amante más joven. Todas estas historias las compartirá, de forma cada vez más intensa, con la excéntrica Frankie, a quien inicialmente soporta por obligación y con quien termina por crear un vínculo muy fuerte. Frankie la volverá loca con sus ocurrencias, pero también la animará en los momentos más oscuros; la espantará con su forma heterodoxa de entender la maternidad, pero también le demostrará que el amor sin libertad y confianza no tiene sentido.

El glamuroso personaje de Grace encuentra en la bella y talentosa Jane Fonda un cuerpo perfecto al que amoldarse. Activa en la industria del cine desde 1960, Fonda amagó una retirada a principios de los noventa, pero nos ha ido visitando a través de las pantallas (sobre todo de la grande) de cuando en cuando. No se ha prodigado mucho en televisión, pero Grace y Frankie compensa esa escasez. En ella, Grace es omnipresente, y un personaje que evoluciona de forma notable. Además, como ya ocurría con Frankie y Lily Tomlin, la ficción y la realidad encuentran puntos de conexión en el espíritu comprometido, el feminismo y el cuidado consciente del cuerpo que comparten Grace Hanson y Jane Fonda. Ésta ha sido desde el Movimiento de los Derechos Civiles un icono de la lucha por los derechos de las mujeres y las minorías raciales; ha sido también la imagen del deporte y la actividad física femenina desde que el aeróbic puso en movimiento a millones de americanas; y ha puesto rostro a una carrera exitosa que en Grace toma la forma de su propia empresa y en Jane la de varios premios BAFTA, Globos de Oro y dos Oscars.

Grace y Frankie apoya su poderío cómico en el contraste entre sus dos protagonistas. Son dos mujeres radicalmente distintas que de golpe se encuentran en una situación parecida sin  haberlo decidido. La serie de Netflix es la historia de una crisis vital vista desde el humor. La crónica de una amistad que parecía imposible y sin embargo surge. La peripecia de Frankie. El triple salto con tirabuzón de Grace. El encuentro de dos gigantas de la interpretación en el invierno de sus vidas. Que sea muy largo. Y nosotras que lo veamos.

 

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