«Westworld»(HBO, 2016-): Apuntes varios para comprender mejor la serie
Que Westworld se ha convertido en la niña bonita de HBO no es ninguna novedad. La producción de J.J. Abrams, creada por Jonathan Nolan y Lisa Joy, generó tal expectación que los niveles de exigencia estaban por las nubes y, prácticamente, todos ellos se cumplieron al fin. Westworld empezó espectacular, se aletargó en el camino y mejoró en unos capítulos finales sorprendentes. Muchos niveles de lectura, referencias a la película del mismo nombre y una interpretación actoral a la altura dejaron a Westworld como lo mejorcito de 2016 y eso que HBO, quitando Game of Thrones, no anda del todo bien.
Buena parte del éxito de la serie radica en las muchas capas que se escondían en lo que parecía un simple parque temático, aunque creo que, a estas alturas, nadie se limitaba a creer que la convivencia entre androides y humanos fuera muy apacible.
- Alicia en el País de las Maravillas: Parece una de las más evidentes teniendo en cuenta que el mismísimo Arnold utiliza pasajes de la novela de Lewis Carroll, pero esta no es la única referencia. La historia de Dolores, incluido su vestuario, se asemeja mucho al del personaje de la historia. ¿Simples coincidencias? Muchos especialistas también señalan el uso de frases recurrentes de la novela en la serie Lost. Parece que tendremos Alicia para rato.
- El Minotauro: Si hay laberintos, entonces tiene que haber una Ariadna, un Teseo y un Minotauro y todos ellos, de un modo más evidente que otros, aparecen en la trama de Westworld. Mucha atención en los capítulos finales.
- Michael Crichton no solo fue el autor de Westworld, también de Jurassic Park, con lo cual eso de los parques temáticos y la ciencia como entretenimiento del hombre corriente tampoco suena tan extraño. Androides y dinosaurios. ¿Qué será lo siguiente?
- Y si hablamos de ciencia y cuerpos extraños, entonces cómo no vamos a mencionar las reminiscencias al clásico inmortal de Mary Shelley y Frankenstein o el moderno Prometeo. Ya hemos escrito por activa y por pasiva sobre la criatura de Víctor en Penny Dreadful, y que nadie se asuste, pues en Westworld no veremos a nadie de la novela por aquí, pero sí ciertos paralelismos entre varios de los personajes principales. El Dr. Robert Ford, la sombra de Arnold y el servicial Bernard tendrán algo que decir al respecto.
- Por último no podemos dejar de mencionar las influencias estéticas que tiene Westworld, en especial cuando una escena en concreto nos lleva directamente al maestro Stanley Kubrick y Eyes Wide Shut. El quinto episodio sumerge al espectador en una orgía como pocas veces hemos visto en la televisión y el mundo del celuloide nunca ha sido ajeno a estas. Si con Kubrick asistíamos a la lujosa mansión junto a Tom Cruise, aquí lo hacemos ante la mirada de William, que poco a poco parece aceptar la realidad que le ofrece el mundo de los vaqueros cibernéticos. Tampoco podemos omitir que el toque dorado de los cuerpos que vemos desfilar por allí puedan servir como un homenaje a aquella película de James Bond con un villano muy obsesionado por el oro. Sí, esa misma, nada más y nada menos que Goldfinger, el largometraje dirigido por Guy Hamilton con el mítico Sean Connery.
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